Cuando Menos Te Esperaba

Y puedo cambiar de inspiración.

Porque el corazón a pesar de su constancia

es capaz de dar vueltas y de, a través de infartos,

detenerse.

Observar y desviar sus pasos.

Es capaz de borrar las huellas y el eco de ellos,

porque aquellas pisadas no eran firmes.

No eran más que sombras de arena y sal.

Y esos pasos ansiosos quieren hoy hallar su lugar.

Hacia donde el sol es cálido y rojizo

de verdad.

Donde el mar es dulce y no traiciona

como las aguas a las que tanto me acostumbré a beber.

Porque es complejo, pero a la vez,

desafiante.

Romper la rutina del masoquismo

y el diario color rosa que guardaba de niña,

para empezar de nuevo

desde los orígenes pálidos de una hoja en blanco.

Desde los rincones remotos del alma

que todavía nadie ha recorrido.

Cristales intactos que nadie ha usado todavía,

porque todavía a nadie le había correspondido usarlos...

Ni al de la infancia aturdida,

ni al de los sueños conformes,

pero quizás sí a ti,

el de la piel y el alma de canela.

Que hoy me enloquece sin saber como,

sin saber desde cuando...

Y aunque el tiempo aún gatea prematuro,

hoy me habla, y me dice

que no impedirá nuestro amar.

Ni a mí,

y menos a ti.

El de la sonrisa que encadena

y la mirada que estremece.

Porque el espacio en tu cajón 

está más lleno de lo que puede el vacío,

y a tu cuerpo le sobra el alma que llevas dentro,

ya casi afuera,

porque rebozas y explotas de amor.

Tú, y tu sonrisa, y tu mirar.

Y en tu pequeñez,
me sorprende tanta grandeza.

Y en ello me pierdo, me vuelo, te invento

en senderos de espejos de luz

en donde al mirarte,

me hallo en tu reflejo.
En donde encuentro la respuesta a mis preguntas,

esas que nunca llegué formular.

El latido inverso que complementa el mío,

antes de que pueda respirar.

El sueño que hiciste sol antes de imaginar el rayo.

El poema cuando apenas buscaba un verso en soledad.

La canción que compusimos sin pensarlo,

cuando sólo buscabas tu y yo un acorde fugaz

y que ahora no me es posible silenciar.

En donde encuentro al destino cara a cara

cuando menos lo buscaba.

Y este fuego frente a ti, cuando menos te esperaba...

Anaíro.

Lunes, 1 de Septiembre. 11:42 pm